La mecánica de la serie era bastante simple: los cuatro solían llegar a algún pueblito donde el villano opresor de turno hacía la vida imposible a los habitantes; se ponían manos a la obra, y aproximadamente una hora más tarde, la cosa estaba resuelta. Cada uno de los cuatro componentes, todos ellos hombres, aportaba algo al grupo: Hannibal era el cerebro, M.A. la fuerza bruta, Murdock era el que pilotaba los aviones y aportaba el punto de locura al grupo con sus excentricidades (y personalmente era el único que me resultaba interesante), y Fénix era el listillo que siempre se ligaba a la chica guapa de turno de cada capítulo.
En los anuncios de Media Markt, cada uno de los personajes tiene una contrapartida en forma de parodia (es decir, todos son una versión exagerada de los originales, que ya de por sí eran bastante autoparódicos), pero el asunto es que hay un quinto miembro... que es una chica: Megan Byte.
La cosa es bastante significativa. En la serie original, las chicas apenas jugaban ningún papel: eran la damisela en apuros, el ligue de Fénix... en los ochenta realmente era una rareza que en este tipo de series de acción las chicas hicieran algo importante. Pero desde los ochenta hasta ahora la cosa ha cambiado muchísmo, y las chicas no sólo se pusieron las pilas y empezaron a luchar también, sino que fueron surgiendo series en las que ellas eran las protagonistas: luchadoras como Nikita, Xena, Sydney Bristow (Alias) o Buffy.
Así pues, en la parodia de 2012 del Equipo A contamos con una chica. El progreso logrado es evidente, pero aún así queda mucho camino por andar, y Megan Byte, pese a su actitud desafiante y segura de sí misma, no lo resuelve todo. En primer lugar, no deja de ser "la chica" del grupo. La primera cosa que la define es su diferencia sexual, es decir, en un equipo conformado por hombres por defecto, ella es la excepción. (Y si quieres más pistas, observa cómo en el anuncio la presentan al final, como en las enumeraciones sale al final, como en la lista de personajes sale al final). Por otro lado, su video de presentación hace hincapié en su condición de buenorra del grupo, mostrando a la contrapartida de Murdock pellizcándola (a lo que ella responde con la estereotípica bofetada) y otras imágenes de ella posando con ropa ceñida.
Irónicamente, Megan Byte representa, de cara al anuncio, la posibilidad de comprar cosas tanto en la tienda física como por internet, y los publicistas de esta campaña han transmitido este concepto con el mensaje de que la chica es a la vez "real y virtual". Así que ahí lo tienes: ¡la única chica del grupo ni siquiera es real al 100%!
No voy a ser totalmente negativo: me gusta Megan Byte. Me gusta su actitud desafiante. Me gusta su poder de teletransporte. Me gusta que aunque todo esto no sea más que una serie de anuncios, esta chica real y virtual se haya hecho un hueco en un grupo tan rebosante de testosterona como este. Pero no me gusta verla despeinándose y mareándose porque el falso Murdock la hace teletransportarse contra su voluntad una y otra vez. Tampoco me gusta verla dándole un vasito de ¿leche? al falso Hannibal. Y es que si algo demuestra Megan Byte es que el machismo, aunque hoy en día sea más sutil y no campe tanto a sus anchas, no tiene nada de virtual: es muy real y sigue vivo y coleando.